Podemos mejorarlo

Otra de las cosas que me fije el pasado Domingo en la reunión canina es de la peligrosidad de algunas instalaciones situadas en la explanada del polideportivo de Canyamars.

Alguna vez recuerdo haber oído al regidor de Progres Municipal Sr. Edgar Olles intervenir en un pleno quejándose del estado de las instalaciones infantiles y no termine de entender a que se refería.

Me parece que se quejaba de algunas de estas cosas, sin obtener resultados ni atención por parte del equipo de gobierno mas ocupado en otros menesteres.

Voy a exponer lo que yo veo con espíritu constructivo esperando que si lo lee alguna persona con capacidad para hacer los cambios necesarios entienda mi preocupación.

Empecemos por el equipamiento deportivo: mesa de ping pong, deporte que se puede disfrutar al aire libre siempre que no haga aire dado lo liviano de la pelota que utilizan.

Una mesa magnifica supongo que instalada a petición de los numerosos practicantes de este deporte que deben haber en Canyamars, deberíamos fijarnos en las bien formadas aristas que si bien es poco probable que un jugador de ping pong se de un golpe, si que es bastante mas probable y a la vez peligroso que alguien que juegue a baloncesto acabe dándose un buen porrazo dada la cercanía a la canasta y lo físico del deporte del básquet que como todo el mundo sabe se juega dando saltos con la atencion puesta en un cesta colgada de un soporte elevado.

Por si las posibilidades de hacerse daño son pocas, la mesa se ha situado junto a un área de patinaje o skate board, deporte en el que los practicantes hacen cabriolas y malabarismos sobre una tabla con ruedas.

Estos disponen de una pequeña pista en la que pueden realizar sus saltos pero harían muy bien de equiparse con un buen casco homologado ya que les han puesto en medio un cajón con las aristas metálicas dotado de unos buenos y resistentes cantos vivos, que serán la pesadilla de un neurocirujano en el caso que se den un golpe sin protección en ellos.

Los demás profesionales de la medicina tienen el trabajo asegurado si observamos el resto de la pista, mal mantenida a la que le faltan numerosos tornillos de sujeción a las tablas que le dan forma.

Si esta zona es un peligro, la del campo de futbol + básquet es para ir también con mucho cuidado, el equipamiento esta rodeado de unas sólidas losas de granito en todo su perímetro con los cantos bien vivos, a la espera paciente que el practicante de uno de los dos deportes tenga un tropiezo, ya se pueden dar cabezazos que no romperán los duros y bien colocados bancos.

Si a todo esto le añadimos que la ambulancia más próxima esta a mas de 20 kilómetros y tarda media hora en llegar, ocurre que el espacio prácticamente no se utiliza para la práctica de los deportes para los que se ha equipado y es que la mayoría de la gente tiene sentido común. 

La década prodigiosa en la que el ayuntamiento ha dispuesto de los mayores recursos de su historia nos ha dejado estos fantásticos equipamientos en Canyamars, a lo mejor solo hay que hacer unas reformas con la vista puesta en la seguridad para convertirlo en un lugar mas utilizado para la practica deportiva.